Annamarie Sauter: En la cruz, Jesús dijo, “Consumado es”. Elyse Fitzpatrick dice que a menudo no creemos eso realmente.
Elyse Fitzpatrick: Ahora, Él no dijo, “Consumado es, pero ahora necesito que hagas esto y esto y esto y esto, y aquello y si no lo haces, cosas malas te van a pasar”. No, todo lo que se necesitaba hacer para conectarte con Dios Padre como tu Padre y con Jesucristo como tu Esposo fue consumado para siempre.
Annamarie: Gracias por sintonizar hoy Aviva Nuestros Corazones con Nancy Leigh DeMoss en la voz de Patricia de Saladín. Aquí está Nancy.
Nancy Leigh DeMoss: ¿Sabes lo que es el Evangelio? Ahora, yo me imagino que la mayoría de las personas escuchando mi voz dirían, “Sí, yo sé lo que es el Evangelio.” Pero, ¿sabes lo que significa el Evangelio para situaciones difíciles en tu vida? Por ejemplo: ¿Cómo se relaciona el Evangelio …
Annamarie Sauter: En la cruz, Jesús dijo, “Consumado es”. Elyse Fitzpatrick dice que a menudo no creemos eso realmente.
Elyse Fitzpatrick: Ahora, Él no dijo, “Consumado es, pero ahora necesito que hagas esto y esto y esto y esto, y aquello y si no lo haces, cosas malas te van a pasar”. No, todo lo que se necesitaba hacer para conectarte con Dios Padre como tu Padre y con Jesucristo como tu Esposo fue consumado para siempre.
Annamarie: Gracias por sintonizar hoy Aviva Nuestros Corazones con Nancy Leigh DeMoss en la voz de Patricia de Saladín. Aquí está Nancy.
Nancy Leigh DeMoss: ¿Sabes lo que es el Evangelio? Ahora, yo me imagino que la mayoría de las personas escuchando mi voz dirían, “Sí, yo sé lo que es el Evangelio.” Pero, ¿sabes lo que significa el Evangelio para situaciones difíciles en tu vida? Por ejemplo: ¿Cómo se relaciona el Evangelio en una situación cuando tus hijos se están portando mal? ¿O has preparado una comida especial y te sale mal? ¿O cuando tus amigas se reúnen y te sientes excluída?
Bueno, mi amiga Elyse Fitzpatrick le va a hacer frente a todas estas situaciones en el mensaje que vamos a escuchar hoy. Ella explicará cómo el Evangelio de Jesucristo se relaciona a estas situaciones prácticas de la vida real.
Ayer, comenzamos a escuchar un mensaje que Elyse dio en la conferencia Mujer Verdadera 2012. Si alguna vez te sientes como que nunca puedes hacer lo suficiente para hacer a Dios feliz contigo, no te pierdas este mensaje.
Ayer, Ely leyó en 2da de Pedro, capítulo 1. Antes de escuchar a Elyse nuevamente, permíteme leer este pasaje:
Por esta razón también, [dice el apóstol] “obrando con toda diligencia, añadid a vuestra fe, virtud, y a la virtud, conocimiento; al conocimiento, dominio propio, al dominio propio, perseverancia, y a la perseverancia, piedad, a la piedad, fraternidad y a la fraternidad, amor. Porque el que carece de estas virtudes es ciego o corto de vista, habiendo olvidado la purificación de sus pecados pasados”. (vv. 5-7,9)
Y Señor, oro que nos laves con Tu Palabra y que hables a nuestros corazones. Danos oídos para oír y corazones para recibir lo que tienes que decirnos en estos próximos momentos. Te lo pido en el nombre de Jesús, amén.
Ahora, unámonos a Elyse Fitzpatrick para la segunda parte del mensaje, “Porque Él me ama.”
Elyse: ¿A cuántas de ustedes Dios las salvó siendo ya adultas? ¿Te acuerdas ya siendo adulta cuando Dios te salvó? Estabas feliz, ¿verdad? ¡Oh, Yo me acuerdo. Yo no fui salva hasta antes de cumplir 21 años, y me acuerdo que había como esa cosa extraña llamada gozo. Al mes siguiente ya estaba inscrita en el Instituto Bíblico, estaba aprendiendo acerca de todas las cosas que yo tenía que hacer. Al poco tiempo ya no se trataba del gozo ni de Jesús. Ahora se trataba acerca de ponerme las pilas y convertirme en la más santa, la más santica.
Ahora, yo no estoy diciendo que no busques la obediencia, pero si aprendes a leer la Biblia, todos los mandamientos, particularmente en las epístolas. Jesús dijo que Él estaba en todas partes. Todos los mandamientos están en el contexto de lo que Cristo ya ha hecho. Así es que cuando Pedro en 2da de Pedro está hablando acerca de esta lista de: “Añade a tu fe virtud, y a tu virtud, conocimiento, y a tu conocimiento, dominio propio, y a tu dominio propio perseverancia,” cuando Pedro está diciendo todo esto, él está hablando en un contexto específico. Y el contexto es: Tú has sido perdonada, así es que vive a la luz de eso ahora. El contexto no es, saca tu lapicero y haz una lista de cosas que vas a hacer hoy, y luego sácalo del contexto. ¿Entiendes?
Así que cuando Pedro en 2da de Pedro está hablando acerca de esta lista de añade a tu fe virtud, y a tu virtud, conocimiento, y a tu conocimiento, dominio propio, y a tu dominio propio perseverancia, cuando Pedro está diciendo todo esto está hablando en contexto, el contexto en que Pedro está diciendo esto es tú has sido perdonada, así que vive ahora a la luz de eso, el contexto no es saca tu lapicero y haced una lista de todas las cosas que luego vas a hacer hoy y entonces sacarlo del contexto. ¿Entiendes? Cuando comienzas a leer la Biblia entiendes que la Biblia realmente está escrita en dos categorías: Ley y Evangelio. Toda la ley se expresa en el Evangelio. Aún los Diez Mandamientos son dados en el contexto de: Yo soy tu Dios que te he sacado de la tierra de Egipto; por consiguiente, haz esto.
Mira, todo en la Biblia que viene a ti en forma de ley siempre te es dado dentro de un contexto, ese contexto puedes estar a unas cuantas palabras de distancia, quizás a varios versos de distancia, pero siempre está en el contexto de lo que Dios ya ha hecho por ti. No preguntes ¿Qué haría Jesús, en esta o aquella situación? Hasta que tú primero hayas sumergido tu alma en la gloriosa verdad de lo que Jesús ya hizo. Eso es lo que tú necesitas escuchar. Lo que eso hará para ti, es lo que te va a dar el viento para tus velas.
Mira, ¿De dónde viene el gozo? Y, a propósito, el gozo del Señor es tu fortaleza para obedecer. ¿Verdad? Nehemías 8:10, dice: “Es el gozo del Señor que es tu fortaleza para obedecer”. Entonces, ¿De dónde viene el gozo?
Bueno déjame decirte primero de dónde no viene. ¿Estás lista para escuchar? El gozo no viene de reglas. No viene de obligaciones acerca de lo que se supone que debes hacer para ponerte las pilas, para que tu familia entre al reino de Dios, o tu iglesia, o esta nación, en el autobús, o camino a donde Dios te quiere. No es de ahí que nos viene el gozo.
El gozo viene de lo que Él ya ha hecho. “Oh, ¿quieres decir que me amas? ¿Quieres decir que Tú me perdonas? ¿Quieres decir que cuando me miras, soy perfecta ante Tus ojos? ¿Quieres decir que soy Tu hija amada? ¿Quieres decir que Tú me has dado todo, todo lo que voy a necesitar? ¿Todo lo que necesito para ser agradable a Ti, ya me lo diste?” Ves de ahí viene el gozo. Tu fortaleza es el gozo del Señor.
Rápidamente ahora: el mensaje del Evangelio. ¿Están listas? Aquí vamos entonces. ¿Qué es el Evangelio? En primer lugar, el Evangelio es la encarnación de la Segunda Persona de la Trinidad, Jesucristo. Dios Hijo, quien era el Verbo, entró en el óvulo de la Virgen María. Poink! ¿De verdad? Y gestó por nueve meses y nació, con todo y placenta, así como cualquier otro bebé. La Biblia nos dice que cuando la gente lo veía, no pensaban que había algo inusual en Él lo veían como a cualquier otro bebé.
Nació, y desde su primer aliento, desde su primer respiro, tiene un corazón inocente, un corazón casto, y no tiene pecado. A propósito, Él es circuncidado, eso significa cortar el pecado y gracia para el pacto. Él no necesita hacer eso. Él es el pacto. Él lo hace por ti. Es circuncidado. Le nombran Yeshúa – “Él salvará a Su pueblo de sus pecados”. Desde Su primer respiro, ya iba camino al Calvario.
Pero no solo iba en camino al Calvario a morir. Él tenía que vivir y cumplir la ley en tu vida. Así que cuando la ley viene a ti y te dice, “fallaste hoy. No debiste haber dicho lo que dijiste. Fallaste.” ¿Sabes lo que puedes decir? “Cállate ley. Jesucristo ya lo cumplió por mí”. Eso es lo que puedes decir.
Él vivió toda Su vida sin pecado. Luego llega al Calvario. En el Getsemaní, Él se está retorciendo en la tierra porque Él sabe lo que le espera, y lo que le espera a Él, sobre todo, no es espada, ni clavos ni corona de espinas, aunque esas cosas le esperan también. ¿Sabes de verdad lo que le espera a Él? Lo que le espera a Él es la ira del Dios Padre con quien Él ha disfrutado toda Su vida y antes de eso, en la eternidad, en perfecta, inocente y gozosa comunión de amor. En ese momento, en la cruz, Dios Padre guarda silencio cuando Su Hijo clama.
¿Sabes por qué? Porque así tú nunca serías abandonada por causa del pecado. Escúchame. ¿Tú crees que Dios te abandonará porque pecas? Escucha. No, nunca. ¿Cómo yo sé eso? Porque Él, el Padre, abandonó a su Hijo en tu lugar y Jesús, el Hombre. Clama en el mismo momento cuando Él debió haber sido reivindicado, cuando Dios debió romper los cielos y bajar con una fuerza angelical y liberar al Hijo. En ese mismo momento Jesús clama, “Dios mío, Dios mío, ¿Por qué me has abandonado?”
¿Para qué lo hizo? Bueno para que tú supieras que nunca serías abandonada por causa de tu pecado. Esas son Buenas Noticias. ¿Sabes por qué son buenas noticias? Porque tú pecas todo el tiempo, y siempre estás como dudando si Dios te abandona por tu pecado o no. Yo te estoy diciendo ahora: No lo está haciendo. ¿Cómo yo lo sé? Porque Él ya abandonó a Su Hijo en tu lugar.
Cuando Él dice esas dos palabras: “Consumado es.” Ahora, Él no dijo, “Consumado es, pero también necesito además que hagas esto, y esto, y esto, y esto, y aquello y si no lo haces, cosas malas te van a pasar”. No, no, no, Todo lo que necesitaba hacerse para conectarte con Dios Padre como tu Padre y a Jesucristo como tu esposo fue consumado por siempre.
Aun en medio de eso, aun en medio de “Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?” Jesús dice, “Padre.” Todavía lo llama “Padre.” “Padre, en Tus manos encomiendo Mi Espíritu.” Él muere en tu lugar.
¿Sabes lo que mereces por tu pecado? Es decir, no estoy hablando del grande. Estoy hablando del pecado que cometiste hoy. Mereces morir. ¿Verdad? Porque no estás amando a Dios con todo tu corazón, alma, mente, y fuerza. No estás amando a tu prójimo como a ti misma. Merecemos la muerte. Ese es el pacto que fue promulgado en el Edén. “El alma que pecare morirá.”
Así es que tú mereces morir, pero ahí está Él, Él está muriendo en tu lugar. Él muere. Y luego, escúchame, Él dice, “Consumado es,” y los cielos están en silencio. Y luego Su cuerpo, Su pobre, inocente y sin mancha. Su cuerpo muerto, completamente muerto, muerto, muerto, es bajado y puesto en una tumba. Y tres días después Dios Lo levanta de los muertos como Su “Amén” al “Consumado es” del Hijo.
La resurrección es el “Amén” de Dios al “Consumado es” de Su Hijo. Después el Hijo pasa cuarenta días tratando de ayudar a los discípulos a entender lo que está pasando. Luego Él regresa al Cielo, y la Biblia nos dice que Él levanta Sus manos, y los ángeles dicen, “De la misma manera que subió al cielo, así regresará”.
¿Sabes lo que Él está haciendo? Él está dando la bendición, “Que el Señor te bendiga y te guarde. Que Él haga resplandecer su rostro sobre ti y tenga de ti misericordia. Que el Señor muestre Su rostro sobre ti y te conceda paz.” ¿Quieres saber qué es lo que Jesús está diciendo ahora mismo? Él te está dando su bendición. ¿Sabes por qué? Porque todas estas cosas, “Que el Señor te bendiga y te guarde” - ¿Fue Él bendecido y guardado? No. “El Señor haga resplandecer Su rostro sobre ti,” - ¿Estaba el rostro de Dios resplandeciendo sobre Él en la cruz? No. ¿Fue Dios misericordioso con el Hijo en la cruz? No, “el Señor alce sobre ti Su rostro y te de paz” - ¿Tuvo paz el Hijo paz en la cruz? No.
Entonces puedes ver, ahora, ahora, ahora mismo. El Hijo te lo puede decir porque todo lo que mereces, Él lo llevo. Todo, cada castigo que tú mereces, Él lo llevó.
Entonces qué haces tú ahora con esa información a la luz de esto, sírvele a Dios. ¿Entiendes lo que estoy diciendo? Este es el mensaje que necesitamos. ¿No es este el mensaje que tú necesitas? Es el mensaje que yo necesito. Lo necesito todos los días porque si tú me dices a mí: “Aquí están las cuarenta y dos cosas que necesitas hacer para alcanzar el autobús en la calle,” yo voy a estar orgullosa porque lo hice o desesperada porque no lo hice.
Pero si tú me dices: “Jesucristo lo hizo todo por ti, Elyse, llénate con jubiloso fervor, corre con todo tu corazón tras Él,” y yo te diré, “Oh, sí, Señor. Yo correré. Y luego, en todas las maneras que no lo hago, gracias y en todas las maneras que sí lo hago, gracias y yo sé que tú cumplirás toda Tu buena voluntad.
¿Cómo dice Juan 3:16 – lo decimos? “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a Su Hijo unigénito para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, más tenga vida eterna.” Esas son buenas noticias. ¿Verdad?
¿Cómo impacta esto, en las respuestas de tu corazón cuando no recibes la invitación codiciada? ¿Tú sabes a que me refiero? Descubres que todas tus amigas van a ir a un lugar, pero no te lo dijeron. ¿Está bien que no te invitaron? ¿El hecho de que tú has sido invitada a la fiesta de las fiestas a la Cena de las Bodas del Cordero, estás feliz que tienes esa aunque no recibas la otra invitación?
Mira, te estoy diciendo que ahí es donde funciona el Evangelio. Así es como trabaja el Evangelio. Si se te olvida el Evangelio, entonces vas a pasar todo tu tiempo tratando de entender por qué tus amistades no te quieren. Jesús es suficiente. Él es suficiente. La Cena de las Bodas del Cordero va a ser la fiesta de los siglos. ¿No es cierto?
Entonces no te invitaron. ¿Significa Juan 3:16 nada entonces? Te diré algo. Por lo general no lo entendemos porque ni siquiera está en nuestro radar. Y luego salimos a comprar libros absurdos acerca de cómo afirmarnos con nuestras amistades.
¿Qué pasa cuando tus hijos te faltan al respeto frente a tus amistades? Mis hijos son unos hijos encantadores ahora porque son adultos. Pero cuando estaban pequeños, íbamos a una iglesia donde el pastor le daba un dólar a cualquier niño que subiera y dijera un versículo de la Biblia. Así que yo estoy pendiente porque quiero que mis hijos se vean muy bien, es decir, yo quería que conocieran la Biblia también. (Sonidos de risas) pero yo hacía alarde de ellos. “Ven Joelito.” Joel ahora está en el seminario. Ya se recuperó de mi legalismo. “Joel, ven, Joel. Dile al pastor el versículo de Juan 3:16.” Y la cabeza de Joel da vueltas, y comienza a vomitar, y dice, “odio a Dios”.
No, no, no, no en realidad él no hizo eso, pero tú sabes a lo que me refiero. Siempre que quieres que tus hijos se vean muy buenos y espirituales y tú como que eres una gran mamá - yo realmente tenía mi actuación de madre espiritual muy bien hecha – y es cuando ellos son como el anticristo. ¿En ese momento, está bien que tú has sido adoptada y que esa es tu identidad?
Mira, nuestro problema es que nuestra identidad está envuelta en todo tipo de cosas que no tienen nada que ver con el Evangelio.
Digamos que es domingo en la mañana, ya tú fuiste al supermercado y compraste carne y papas, y sacas tu máquina para hacer pan, y piensas, “Esto va a ser genial porque vamos a llegar a la casa, y vamos a tener comida.” ¡Todo está programado!
Así que nos vamos a la iglesia, y todo el tiempo mientras estás en la iglesia quizás el pastor está predicando acerca de Juan 3:16, y tú con tus “amenes” a lo que él está diciendo, pero en tu mente, estás pensando, “Voy a comer una carne rostizada. Va a estar bien sabrosa.” Entras a tu garaje y abres tu puerta, y no hueles nada. (Risas) Y luego entras, y, claro, se te olvidó programar el horno. Momento en el cual me enojo con Phil. (Risas) Una vez él me dijo que debería escribir un libro llamado, Todos mis pecados son tu culpa. (Risas)
Así que se me olvida programar el horno. “Es tu culpa. Si tú no me hicieras salir corriendo de la casa. Si tú alguna vez no me tocaras la bocina una y otra vez, te voy a tirar mi Biblia encima.” (Risas) Mira, ahí mismo, ahí mismo, ahí mismo, ¿Significa algo para ti Juan 3:16?
¿Significa algo para ti que en la iglesia Jesucristo preparó mesa con Su cuerpo y Su sangre los cuales Él te dió, el pan y el vino, Su cuerpo y Su sangre, y tú de verdad crees que no necesitas esto? Tú ya has tenido la única comida que realmente necesitas, la cual es comida para tu alma. ¿Tiene esto importancia para ti? Cuando te hablo acerca de esto, quizás tú dices en tu corazón, “Sí, claro que me importa,” pero nunca pensamos esto, y no lo pensamos porque tenemos amnesia. Creemos que el reino de Dios se trata acerca de nosotras y lo que nosotras necesitamos hacer, y estamos equivocadas.
Nancy: Elyse Fitzpatrick nos ha estado explicando lo que el Evangelio no es. Y más importante, ella ha estado describiendo lo que el Evangelio sí es y como puede transformar nuestra forma de pensar en cada situación.
Elyse ha escrito acerca del Evangelio y nuestra identidad en Cristo en un libro estupendo titulado “Porque Él me ama” (Because He Loves Me) [ahora mismo solo está disponible en inglés]. Si tú alguna vez tienes problemas creyendo que Dios realmente te ama, Elyse tratará tus preocupaciones al dirigirte al Evangelio. Entenderás quién eres tú en Cristo, que a su vez, transformará tu forma de pensar, tus emociones, y también la manera como tú respondes a todo en la vida.
Annamarie: Gracias, Nancy. Mañana, escucharemos la tercera parte del mensaje de Elyse Fitzpatrick. Entender la gracia te animará en tu crecimiento continuo en Cristo. Elyse hablará más acerca de eso mañana.
Queremos expresar nuestro agradecimiento a Dios por los hermosos testimonios que recibimos diariamente y que nos animan al ver cómo Dios está usando este programa para animar a tantas mujeres alrededor del mundo.
Una radioescucha nos escribió para relatarnos cómo ella y sus amigas se juntan en grupo para escuchar y discutir los programas diariamente.
Cuán agradecida nos sentimos por la forma como Dios usa las verdades de Su Palabra para traer aliento, esperanza y gracia a las vidas de personas que la necesitan. Cada oyente tiene una historia particular y los programas contribuyen a fortalecerles y ministrarles en las diversas situaciones.
Aviva Nuestros Corazones ha sido de bendición para muchos que se han mantenido fieles durante muchos años. Pero este ministerio se hace una realidad debido a la fidelidad de muchos oyentes que contribuyen mensualmente para ayudarnos a distribuir los mensajes internacionalmente.
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Aviva Nuestros Corazones con Nancy Leigh DeMoss en un ministerio de alcance de Life Action Ministries.
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Música: En La Cruz, Un Corazón, Espejos ℗ 2015 Un Corazón
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